Documento de consenso
Las finalidades educativas son un documento a medio y largo plazo del Proyecto de Centro que contiene los fines básicos o metas que el centro se propone alcanzar.
Estas finalidades quieren ser un documento de consenso de toda la comunidad educativa del centro, ya que es uno de los apartados más trascendentes de un proyecto.
La participación de toda la comunidad es un mandato constitucional:
«Los profesores, los padres y, en su caso, los alumnos intervendrán en el control y gestión de todos los centros sostenidos por la Administración con fondos públicos, en los términos que la ley establezca.»
Constitución Española, art. 27, apartado 7.
El éxito de este documento estará en ser asumido por todos como el marco de referencia en que ha de moverse toda la actividad del centro.
Estas finalidades reflejan también las señas de identidad de nuestro colegio. Nos singularizan y nos diferencian de los demás, dando personalidad propia a nuestro proyecto de centro.
Estas finalidades serán, por tanto, el norte que oriente el resto de documentos y decisiones que tomemos, un marco de referencia que debemos tener siempre a mano.
Enfoque Metodológico
La investigación educativa, y especialmente a aquella más vinculada a las didácticas específicas, viene poniendo en evidencia que las pautas características de la enseñanza tradicional no provocan un aprendizaje significativo y relevante en la mayoría de los alumnos y viene proponiendo y experimentando modelos alternativos más coherentes con las conclusiones obtenidas.
La educación emocional es una innovación educativa que responde a necesidades sociales no atendidas en las materias académicas ordinarias. La fundamentación está en el concepto de emoción, teorías de la emoción, la neurociencia, la psiconeuroinmunología, la teoría de las inteligencias múltiples, la inteligencia emocional, el fluir, los movimientos de renovación pedagógica, la educación psicológica, la educación para la salud, las habilidades sociales, las investigaciones sobre el bienestar subjetivo, etc.
Nuestra primera finalidad educativa será precisamente ir cambiando a un nuevo enfoque metodológico basado en la EDUCACIÓN EMOCIONAL.
Formación del profesorado
El objetivo de la educación emocional es el desarrollo de competencias emocionales: conciencia emocional, regulación emocional, autogestión, inteligencia interpersonal, habilidades de vida y bienestar. La práctica de la educación emocional implica diseñar programas fundamentados en un marco teórico, que para llevarlos a la práctica hay que contar con profesorado debidamente preparado.
Sin embargo, los profesores no son fácilmente permeables a las propuestas y reflexiones de los investigadores, dado que tienen concepciones explícitas e implícitas sobre la enseñanza y el aprendizaje, coherentes con las tradiciones curriculares y con las características del contexto donde trabajan, que actúan como obstáculos internos para el cambio y la innovación. Otra de nuestras finalidades educativas, por tanto será la formación del profesorado en este campo.
Convivencia
Desde nuestro Proyecto apostaremos por el diálogo y el respeto como pilares en los que sustentar esta convivencia, sin menoscabo de actuaciones de otro tipo cuando las circunstancias así lo requieran.
Sin duda, la creación de un espacio físico agradable en aulas, pasillos y exteriores, también contribuirán a la consecución de esta finalidad.
Respeto y valoración de lo Público
Esta finalidad es global porque atañe a toda la Comunidad educativa:
Los padres tienen que valorar positivamente la opción de Enseñanza Pública y no considerarla una oferta inferior a otras.
A ellos les pedimos: colaboración, preocupación por el Centro, participación en actividades y órganos colegiados, seguimiento académico y social de sus hijos.
Los alumnos deben tomar conciencia del esfuerzo que la sociedad en su conjunto realiza para ofrecerles una enseñanza de calidad y unas instalaciones y servicios dignos.
A ellos les pedimos que no desaprovechen la oportunidad que se les presenta, que consideren el Centro como algo suyo y de sus futuros compañeros y, por tanto, cuiden el material y las instalaciones, entendiendo que los recursos económicos son limitados y que los gastos en reparaciones, imposibilitan inversiones en mejoras de otro tipo.
Los profesores debemos ofrecer una enseñanza de calidad, sin olvidar la educación en valores tan necesaria para convivir en nuestra sociedad.
A ellos les pedimos que se impliquen en la defensa de lo público. Sobre nosotros recae en mayor medida aspectos tan importantes como:
– Conocimiento de las características psicopedagógicas del grupo de alumnos a quienes se imparten clases, así como de la historia personal de algunos de ellos. Este conocimiento es una herramienta primordial en nuestro trabajo.
– Compromiso con el Proyecto Educativo del Centro. Es este proyecto el que marca las líneas de trabajo a desarrollar en el día a día.
– Compromiso con las decisiones colegiadas relativas a la organización y funcionamiento del Centro.
El personal no docente debe entender que la tarea que desempeñan es esencial para el buen funcionamiento del Centro.
A ellos les pedimos amabilidad en el trato, orden y eficacia en su trabajo.
Educar en valores
Se trata de una tarea que debe impregnar toda la vida del Centro y, por tanto, debe trabajarse desde todas las áreas. Debemos estar atentos y no perder ninguna oportunidad que nos ayude a desempeñar una de las labores más nobles que podemos realizar: la de educar.
Vivimos en una sociedad democrática que nos exige participación, tolerancia, respeto, libertad de expresión, igualdad entre sexos, educación para la paz…; valores todos que hay que inculcar desde los primeros años de vida, comenzando principalmente en la familia, respaldada por la Institución escolar.
Potenciaremos, por tanto, la participación en órganos colegiados y otros colectivos: Claustros, Consejo Escolar, ETCP, Departamentos, Asociación de Alumnos, AMPA…
Atención a la diversidad
Es de justicia que nuestro Centro utilice todos los recursos (profesores de apoyo, encuentros con el EOE, modelos de agrupamientos, Plan de acompañamiento, Tutorías individualizadas…) para atender las necesidades de cada alumno y en especial las de aquellos que sean de integración.
Autoestima y autonomía personal
Debemos trabajar no sólo para formar a los alumnos académicamente, sino también personalmente; ayudándoles a adquirir una autonomía personal que les permita desenvolverse en una sociedad tan cambiante como es en la que estamos insertos.
Cada vez es más frecuente que se demanden personas con un mayor número de recursos y esto es imposible conseguirlo sin una buena autoestima, que permitirá enfrentarse sin miedos a situaciones desconocidas. Por ello, creemos necesario que a través de las tutorías se trabajen estos dos aspectos. Es muy interesante establecer estrategias y modelos pedagógicos que faciliten la adquisición de esta finalidad.
Multiculturalidad
Debemos educar a nuestros alumnos en el respeto a las diferentes razas, costumbres, religiones… Debemos fomentar la tolerancia hacia lo diferente desde la perspectiva de que estas diferencias nos enriquecen a todos.
Debemos procurar la integración social e idiomática de los alumnos extranjeros, ubicados en diferentes grupos–clases.
Espíritu crítico
Las nuevas tecnologías nos permiten vivir en un mundo globalizado, donde de forma inmediata lo que ocurre en un extremo es conocido por todos. Esta información nos viene mediatizada por los intereses de las grandes empresas dedicadas a la información y la comunicación. Podemos observar a diario cómo una determinada noticia se nos ofrece desde diferentes puntos de vista, pudiendo a veces llegar a ser contradictorias las diferentes versiones presentadas.
Podemos decir que somos manipulados por los medios de comunicación, por lo que es necesario dotar a nuestros alumnos de un espíritu crítico para afrontar esta realidad y ser capaces de sacar sus propias conclusiones y actuar en consecuencia.
Evaluación formativa
No queremos en este apartado referirnos únicamente a la evaluación de alumnos, por el contrario, entendemos que ésta debe incluir aspectos relacionados con la organización y funcionamiento del Centro.
Realizar una evaluación al final de un proceso, sólo nos permite calificarlo como positivo o negativo; sin embargo, entendemos que realizar una evaluación durante todo el proceso, nos aportará información que nos permita reflexionar y actuar en la búsqueda de los ajustes necesarios de aquellos aspectos que lo necesiten.
Dotar de identidad al Centro
Al ser un centro de creación reciente, aún no tiene una identidad propia, debemos por tanto trabajar para dotarlo de esta identidad, haciendo cumplir todas las finalidades educativas arriba propuestas.